Como pieza inicial construida del masterplan que expande un borde de la ciudad, Guayaquil Country Club busca ser un lugar de encuentro para más de 2000 familias. Es un club social y deportivo que alberga tradición e intercambio social rodeado de naturaleza. 90 años después de su primer establecimiento, Guayaquil Country Club se muda a su tercera ubicación como estrategia cerca de los desarrollos residenciales actuales y la población joven de Guayaquil. El sitio del proyecto, anteriormente un campo de arroz, es una vasta llanura envuelta por cielos azules, el río Babahoyo y un brillante sol ecuatorial.

La Casa Club reinterpreta una serie de elementos arquitectónicos atemporales en una composición fresca. Fue concebido como el núcleo del proyecto que sirve como plataforma para crear nuevos recuerdos, pero lo que es más importante, es el espacio de bienvenida en donde los visitantes pueden apreciar el legado del club. Esta estructura se eleva sobre el resto de los elementos construidos mientras mira hacia el este y el oeste, donde las cubiertas están estratégicamente inclinadas para proteger del impacto solar y permitir a su vez una conexión entre los espacios interiores y la vegetación del contexto.

La materialidad de la Casa Club busca coherencia y respeto a sus versiones anteriores y la cromática del lugar. Si bien las fachadas están revestidas con la misma piedra caliza que antes se utilizó, esta vez presentan un patrón y un corte distintos.